Cuando hablamos de cookies, puede que te vengan a la cabeza dos conceptos. Primero, las galletas que te comes cada día en el desayuno, y otra, las cookies de Internet.
Si estás pensando en las cookies que aparecen en Internet cada vez que entras a un servidor web, enhorabuena, estás bien actualizado en lo que respecta al mundo digital.
Pero, ¿qué son realmente las cookies y para qué sirven?
¿Qué son las cookies? ¿Esto se come? Pues no. Las cookies de Internet son archivos creados por un sitio web que controlan los movimientos del usuario y guardan datos con la finalidad de saber si por ejemplo, una persona entra de forma recurrente, o no, a un servidor web específico o si está interesado en comprar determinados productos o servicios.
Normalmente lo que hacemos al entrar a un sitio web por primera vez, es aceptar las cookies rápidamente para visualizar lo qué nos interesa de aquel sitio. No obstante, con el hecho de aceptarlas, estás permitiendo que controlen tu frecuencia de acciones en Internet.
Seguro que alguna vez te has preguntado el por qué te aparecen anuncios de productos que has visitado hace un par de días, o incluso meses, y es que, todo es fruto de las cookies. Tienen como punto de mira el hecho de ‘’facilitar la vida’’ al usuario y ofrecerle aquellos artículos recomendados según sus preferencias. A cambio, ‘’se alimentan’’ de tus datos.
Las cookies, como cualquier otro concepto, tienen sus pros y sus contras y, la verdad es que tienen algunas utilidades que te pueden ir muy bien.
Vamos a descubrirlas:
Inicio de sesión
Las cookies son muy útiles para aquellas veces que entras en un sitio web que requiere el inicio de sesión y sin querer, cierras la página. Gracias a ellas, puedes volver atrás sin ningún problema, y sin tener que volver a introducir tus datos personales de usuario y contraseña.
Carrito de la compra
Otra de las ventajas de las cookies es que cuando estás realizando una compra en Internet, puedes añadir todos los artículos que deseas en el carrito de la compra y simultáneamente, seguir navegando por la tienda online sin tener que volver a introducir todos los productos que has puesto en la cesta. Se guardan en el carrito gracias a ellas.
Qué idioma hablas
Seguro que alguna vez te has parado a pensar por qué al acceder a una página web se te abre directamente la página a tu idioma. Pues también es fruto de las cookies, ya que identifican tu lengua para facilitar que te llegue la información tal cómo la deseas.
Tienen memoria
Cuando entras en un sitio web, las cookies hacen que se te muestre tal como has configurado previamente según tus preferencias en cuanto al diseño, tamaño de letras, tipografía, colores, entre otros. Tienen mucha ‘memoria’ y hacen que se te muestre todo tal cómo los has personalizado desde un principio.
Conclusiones
Ahora ya sabes por qué te aparecen cada dos por tres anuncios de productos en los que estás interesado. No es fruto de la casualidad, son las cookies, que controlan tus hábitos de consumo y registran cada paso qué haces o dejas de hacer en Internet. Estos ficheros con nombre de galleta, pueden resultar muy útiles para algunas cosas, pero un problema para otras. Intenta identificar qué estás aceptando al momento de activar las cookies.
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